Puebla de Sancho Pérez

A pocos kilómetros de Zafra, situada entre las sierras de Castellar y de los Santos, encontrarás Puebla de Sancho Pérez, conocida, además de por su balneario de El Raposo, por ser tierra natal de la gran figura del toreo Alejandro Talavante. Y es normal que de esta villa haya salido un torero de su altura, pues su plaza de toros está considerada por los expertos como una de las más antiguas de España. Te llamará la atención que en realidad no se trata de una plaza de toros con capilla, si no de un santuario, la ermita de Nuestra Señora de Belén, con una plaza de toros de planta rectangular adosada.

Precisamente es a esta ermita a la que acuden los peranos, o los zorros, como se conoce a los habitantes de Puebla de Sancho Pérez, para celebrar el Torrisco o Domingo de Quasimodo. Se trata de una romería en torno a este santuario celebrada el domingo siguiente al domingo de Resurrección.

La Iglesia parroquial de Puebla de Sancho Pérez está dedicada a Santa Lucía y se levantó en el siglo XVI sobre otra mudéjar.

El Balneario de El Raposo al que hacíamos mención anteriormente, se encuentra a 6 kilómetros de la Puebla de Sancho Pérez y sus aguas fueron declaradas de utilidad pública en julio de 1926, por tener propiedades curativas contra enfermedades reumáticas y otras dolencias. El lodo del balneario se extrae de un arroyo cercano y es almacenado en unos tanques de maduración, para usarlo después en tratamientos. Al estar fuera del casco urbano, en plena naturaleza, el balneario es además un lugar excelente para desconectar de la rutina diaria.

En Puebla de Sancho Pérez se producen también algunos de los mejores vinos de la región. En cuanto a la gastronomía, cabe destacar unos dulces muy especiales: "los perritos". Se hacen para San Blas y son dulces de masa de pan y huevo con forma de perro.