Zafra, Jerez de los Caballeros y Fregenal de la Sierra

En la sierra suroeste de Badajoz  se encuentran enclavados tres municipios, declarados Bienes de Interés Cultural, en la categoría de Conjunto Histórico-Artístico, de gran importancia en la provincia de Extremadura.

Zafra, una de esas ciudades que esconde mil y un secretos, es conocida como Sevilla la Chica. La ciudad se consolidó gracias al estratégico punto de tránsito de la Vía de la Plata, durante la época romana y la presencia de la Orden de Santiago y Ducado de Feria.

 Entre sus mayores tesoros puedes apreciar el Palacio de los Duques de Feria, a su alrededor podrás observar numerosos vestigios medievales. Además visita el Museo de Santa Clara donde se encuentra el sepulcro del segundo Duque de Feria.

En el centro del núcleo urbano encontrarás la Plaza Grande desde la que a través del Arquillo del Pan, llegarás a la Plaza Chica.

Además, de la belleza arquitectónica también puedes disfruta del arte que alberga la Iglesia de la Candelaria, donde descubrirás un retablo de Zurbarán y otro de Churriguera.

De Zafra destaca también su gastronomía y su Feria Internacional del Ganado, una de las más importantes de Europa.

A  poco más de 30 kilómetros  de Zafra, se sitúa Jerez de los Caballeros, declarada Conjunto Histórico Artístico Monumental en 1966,ciudad que vio nacer a Vasco Núñez de Balboa, descubridor del Océano Pacífico. Y dónde podremos visitar el Centro de Interpretación dedicado a él.

En sus cercanías se encuentra el dolmen del Toriñuelo, de origen prerromano, que está declarado Monumento Histórico Nacional. Jerez de los Caballeros, es una ciudad donde la presencia de la Orden del Temple se respira por multitud de rincones. Podrás admirar la Alcazaba oCastillo Templario, su Torre Sangrienta, sin olvidar parte de la muralla que rodeaba la ciudad y las seis puertas que por entonces daban servicio a esta localidad: la de Santiago, la de Burgos, la de Alconchel, de la Villa, Nueva y de Sevilla.

Tampoco puedes dejar de ver la iglesia de Santa María de la Encarnación, el templo más antiguo de Jerez. Según se lee en una columna invertida de su interior, fue fundada en el año 556 y que parece ser que se construyó sobre una anterior basílica visigoda.

Hay que hacer especial mención a las construcciones religiosas y civiles de estilo barroco, que se unen a las ya sugerentes de estilo renacentista y árabe y que presentan un marco admirable para el lucimiento de su Semana Santa, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. Entre otros, no puedes dejar de visitar la Iglesia de Santa Catalina, San Bartolomé y San Miguel.

Y de sus numerosos palacios y casas señoriales pertenecientes a corregidores y familias nobles, no debes perderte la Casa del Sol, en la que se encuentra la oficina de turismo, los palacios de Guzmán Sotomayor, los Marqueses de San Fernando, de Martínez de Logroño o el de la Vicaría, entre otros, y las casas del Solar de los Condes de Berrona, Solar de los Quevedos, la de los Condes de Casa de Ayala, y la de Silva y Figueroa, para empezar.

Del mismo modo merecen especial atención sus conventos. No puedes marchar sin antes haber visitado el convento de Gracia, el convento Madre de Dios, el de San Agustín, entre otros para finalizaren el de Nuestra Señora de la Luz. Por el camino, irás encontrando algunos beatarios, como el de la Esperanza, y ermitas, como la de la Venerable Isabel de la Cruz, la del Espíritu Santo o la de San Gregorio.

Fregenal  de la Sierra, es otros de los pueblos que te recomendamos visitar. De gran interés e importancia, su castillo-fortaleza, cuyas primeras referencias datan de 1253. En su interior alberga un coso taurino y mercado de abastos. Adosada a la entrada del castillo, se encuentra la Iglesia de Santa María. De gran valor también las iglesias de Santa Ana y Santa Catalina. Su Festival Internacional de la Sierra está declarado fiesta de interés turístico regional.

En esta zona podrás disfrutar de una variada gastronomía, el cerdo ibérico toma el papel principal en sus cocinas, platos típicos como el guarrito frito, embutidos, el jamón ibérico de bellota, todo ello regado por un buen vino, licores y unos dulces de la zona.